[EDITORIAL] : Igualdad plena #LoveIsLove
- prensacafe
- 20 jul 2015
- 2 Min. de lectura
La comunidad LGBT de Estados Unidos esperaba el mes de junio con mucha expectativa. Además de ser el mes del orgullo, junio se perfilaba como el mes decisivo para la vida de muchas parejas del mismo sexo. La Corte Suprema de EEUU iba a decidir sobre el matrimonio igualitario en los 50 estados del país americano, luego de que 15 parejas del mismo sexo realizaran una serie de apelaciones con respecto a la prohibición de su derecho al matrimonio, el mismo que -en sus palabras- denigraba su dignidad como seres humanos. De esta manera, la Corte Suprema buscaba resolver unas de las grandes interrogantes en un país que ha decidido, hasta ahora, sumarse a la ola en favor de la igualdad de derechos fundamentales para todos sus ciudadanos.
La última semana de junio, un viernes 26 para ser más exactos, la Corte Suprema de los EEUU enunció el tan esperado veredicto: el órgano supremo de justicia legalizó el amor con la aprobación del matrimonio igualitario en todos los estados. Aplausos y gritos de alegría estallaron a las afueras del la corte, decenas de personas decidieron acampar durante horas a la espera de la histórica decisión. El juez Anthony Kennedy dictaminó que el matrimonio es un derecho constitucional para todos los americanos que, hasta esa fecha, solo 36 estados reconocían y solo 14 de ellos se aferraban a su prohibición.
En un contraste con Latinoamérica, solo Argentina y Uruguay han institucionalizado esta unión en sus territorios. Nuestro país, junto a Venezuela, Bolivia y Paraguay no cuentan con un marco legal alguno de una protección para las parejas del mismo sexo. Solo como antecedente, el 14 de abril de este año, el proyecto de ley que reconocía la unión de parejas del mismo fue archivada por la Comisión de Justicia del congreso peruano a pesar de que cuatro organismos estatales autónomos habían dictaminado informes a favor de dicho proyecto.
Si bien aún existen grandes barreras para alcanzar lo que se debe para la comunidad LGBT en nuestro país, esperemos que el marco legal internacional impulsado recientemente por EEUU impacte de manera positiva en la lucha por la igualdad jurídica y social que merecen todos los ciudadanos, sin prejuicios y sin discriminación por su género u orientación sexual.
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